El ataque estadounidense a instalaciones nucleares en Irán, ocurrido este sábado 21 de junio, generó una fuerte tensión internacional y un marcado contraste en las reacciones de los líderes latinoamericanos. Mientras el presidente argentino, Javier Milei, optó por el silencio oficial, dio claras señales de respaldo a la ofensiva al repostear publicaciones de Donald Trump y Benjamin Netanyahu que celebraban el bombardeo.
Esta postura de Milei contrasta notablemente con la de otros líderes de la región, como el presidente de Chile, Gabriel Boric. En su cuenta de X, Boric condenó enérgicamente el bombardeo estadounidense, declarando: "Defenderemos el respeto al derecho internacional humanitario en todas las instancias. Tener poder no autoriza a utilizarlo vulnerando las reglas que como humanidad nos hemos dado. Aunque seas Estados Unidos". El mandatario chileno exigió paz y criticó el uso del poder militar fuera del marco del derecho internacional.
El hermetismo oficial de Argentina, aunque sin un comunicado formal, no sorprende dada la política exterior que Milei ha sostenido desde su asunción. El presidente ha expresado en reiteradas ocasiones su firme alineamiento con las políticas de Donald Trump y su apoyo irrestricto al Estado de Israel, evitando condenas incluso ante la emergencia humanitaria en Gaza.