El mundo de la música lamenta la partida de Ozzy Osbourne, el icónico rockero británico, quien falleció este martes a la edad de 76 años. La noticia fue confirmada por su familia a través de un comunicado, que informó que Osbourne murió "rodeado de mucho cariño".
Su deceso ocurre apenas unos días después de un concierto multitudinario de despedida en Birmingham, donde compartió escenario con Black Sabbath y una constelación de músicos invitados, en un evento que ya se perfilaba como su último gran acto público. "Con más tristeza de la que las palabras pueden transmitir, tenemos que informar que nuestro querido Ozzy Osbourne falleció esta mañana", expresó la familia, solicitando respeto a su privacidad en estos momentos difíciles.
Una vida marcada por la música y desafíos de salud
Conocido mundialmente como el "Príncipe de las Tinieblas", Ozzy Osbourne forjó una carrera legendaria, primero como vocalista de la influyente banda Black Sabbath, pionera del heavy metal, y luego como exitoso solista. Su vida estuvo llena de excesos y éxitos, pero también de batallas contra problemas de salud en los últimos años.
Osbourne padecía la enfermedad de Parkinson y había enfrentado diversas complicaciones, incluyendo lesiones graves tras una caída en 2019. A pesar de sus dolencias, su espíritu indomable y su inconfundible voz lo mantuvieron en el corazón de millones de fans alrededor del planeta.
Le sobreviven su esposa, Sharon, y sus hijos Aimee, Kelly y Jack, así como Jessica y Louis, fruto de su primer matrimonio con Thelma Riley, y sus numerosos nietos. El legado de Ozzy Osbourne, tanto con Black Sabbath como en su carrera en solitario, perdurará como un pilar fundamental en la historia del rock.