La planta de General Motors (GM), ubicada en Alvear (cerca de Rosario), ha llevado a cabo la desvinculación de 90 empleados en los últimos días mediante el esquema de retiros voluntarios. Esta medida agrava la crisis laboral en la automotriz, cuya plantilla se ha reducido drásticamente en menos de dos años.

Según fuentes del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), los trabajadores desvinculados recibieron una "oferta económica generosa", que asciende a cerca del 120% de las indemnizaciones por ley. Todos los empleados afectados contaban con una antigüedad mínima de 15 años en la fábrica.

 La plantilla se redujo a la mitad

A comienzos de 2024, la planta de GM en Alvear empleaba a más de 1.000 personas (entre personal efectivo y contratado). Con los recientes despidos y la falta de nuevas contrataciones, el número de trabajadores se ha reducido a unos 600, lo que implica una caída cercana al 50% de la fuerza laboral en menos de dos años.

El panorama para el sector no es optimista. Sergio Gazzera, Secretario General del Smata Seccional Rosario, anticipó que la expectativa para el año 2026 en términos de actividad y empleo es "igual o peor" que la actual.

 Efecto de la concentración en la producción

La fuerte disminución de personal se relaciona directamente con cambios en la línea de montaje de la fábrica.

·Fin del Cruze: La descontinuación de la producción del icónico modelo Cruze a fines de 2023 provocó una drástica caída en el volumen de pedidos de piezas a los proveedores locales.

·Tracker como Modelo Único: Desde 2022, la planta ha concentrado su operación exclusivamente en la fabricación de la Chevrolet Tracker.

Debido a su perfil predominantemente exportador, la actividad de la fábrica se ve seriamente afectada por la caída de las ventas en Brasil, el principal mercado de destino del crossover Tracker.