Un viaje de egresados programado para estudiantes de varias escuelas bonaerenses hacia Cariló se transformó en un caos de más de seis horas durante la madrugada, luego de que padres y docentes detectaran graves irregularidades en la conducción. La situación se agravó cuando el chofer inicial fue retirado por la policía tras dar positivo en un test de sustancias, y el conductor enviado como auxilio tampoco estaba apto para manejar.
El incidente comenzó este martes, poco después de las 5:00 horas. Alumnos de la Escuela N.º 16 de Paraje Etchegoyen (Exaltación de la Cruz) abordaron un micro de la empresa Plusmar, que realizó paradas en Escobar y Munro para sumar a estudiantes de otros establecimientos.
Doble positivo en drogas y disturbios
Fue en la parada de Munro donde un grupo de padres, alertados por lo que describieron como "irregularidades", exigió que se le realizara un control de drogas al conductor. A pesar de los intentos iniciales del chofer por eludir el control –según testigos, porque "no realizaba la acción correcta" para el narcotest–, la insistencia de los presentes derivó en la
intervención policial.
Tras varias repeticiones, el examen arrojó un resultado positivo para dos sustancias: cocaína y marihuana. El test de alcoholemia, en cambio, resultó negativo.
Al confirmarse oficialmente el resultado, la indignación de los padres fue tal que la situación se desbordó, llegando incluso a agresiones físicas, por lo que el conductor tuvo que ser escoltado por personal policial para ser retirado del lugar.
El segundo chofer, inhabilitado por fatiga
La empresa organizadora del viaje, Lake Travel, solicitó de urgencia un reemplazo a la compañía de transporte. Sin embargo, la solución se convirtió en un nuevo problema: el segundo chofer que llegó para tomar el control del micro incumplía el tiempo de descanso obligatorio requerido por ley para conducir vehículos de larga distancia, lo que lo inhabilitaba para asumir la ruta.
Recién pasado el mediodía, más de seis horas después de lo previsto y tras una tercera gestión, se presentó un conductor legalmente habilitado. La demora y la intensa tensión generada por los incidentes finalmente se disiparon, y los estudiantes pudieron continuar su viaje hacia la costa atlántica.
