Lo que comenzó como una convocatoria en redes sociales derivó en una situación de violencia urbana sin precedentes en la capital neuquina. Durante la madrugada del último domingo, una caravana de más de 250 motocicletas pertenecientes a grupos que se autodenominan "Stunt" irrumpió en el centro de la ciudad, dejando a su paso un rastro de vandalismo, maltrato animal y riesgo extremo para la población.
Un operativo desbordado y una ciudad "asaltada"
Desde la Municipalidad de Neuquén, el subsecretario de Ambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio, fue categórico al calificar el episodio no como una infracción de tránsito, sino como un "hecho delictivo organizado". A pesar de que la comuna contaba con un despliegue de 50 inspectores tras detectar alertas en grupos de WhatsApp y redes sociales, la magnitud de la invasión —que incluyó motociclistas provenientes de Plottier y Cipolletti— superó cualquier previsión.
El saldo de la violencia: Vandalismo y muerte de animales
La crónica de la jornada detalla escenas de altísima peligrosidad. Los participantes, integrantes de agrupaciones como Stunt Neuquén y Stunt Picantes, avanzaron por la Avenida Argentina realizando maniobras temerarias, circulando por veredas y bulevares, e incluso pateando las puertas de autos particulares que se encontraban detenidos en los semáforos.
La gravedad del evento escaló con dos hechos puntuales:
- Siniestros por negligencia: Dos motocicletas se prendieron fuego (una en Plaza de las Banderas y otra en calle 9 de Julio) debido a sobrecalentamientos causados por las "contraexplosiones" de los escapes libres.
- Muerte de animales: Según denuncias que forman parte de la investigación, el accionar de la caravana habría provocado la muerte de dos perros, un hecho que ha generado una ola de indignación en las redes sociales y que el Municipio planea incluir en su denuncia.
De la multa a la causa penal: El cambio de estrategia oficial
El subsecretario Baggio aclaró que el enfoque del Municipio dejará de ser meramente recaudatorio o contravencional. "Esto excede totalmente una multa por escape libre; estamos ante un delito de intimidación pública", remarcó el funcionario. La estrategia ahora se centra en dos ejes:
- Identificación por cámaras: Se utilizará el sistema de videovigilancia y los videos que los propios infractores subieron a sus redes para poner nombres y apellidos a los responsables.
- Intervención de Fiscalía: La Municipalidad convocó a una reunión urgente con la Policía y la Justicia para que los responsables enfrenten cargos penales, diferenciando la labor de los inspectores (preventiva) de la persecución del delito (judicial).
El clima social y las repercusiones
El suceso no solo dejó daños materiales, sino que ha reavivado un tenso debate en la comunidad neuquina. Mientras el Municipio busca que las cámaras de seguridad sirvan como prueba clave para identificar a los titulares de los vehículos, las redes sociales se han convertido en un hervidero de reclamos que exigen sanciones ejemplares, advirtiendo sobre el riesgo de que estas "juntadas" se vuelvan una práctica incontrolable en la región.
