El Gobierno nacional, bajo la presidencia de Javier Milei, dictó este martes el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 425/2025, mediante el cual amplía el Presupuesto 2025. La medida, publicada en el Boletín Oficial y firmada por el presidente y su gabinete, busca reforzar partidas cruciales en salud, seguridad, subsidios, jubilaciones y el servicio de la deuda pública.
Según los considerandos del decreto, la emergencia económica vigente exige una reasignación inmediata de recursos para asegurar la prestación de servicios esenciales. El texto advierte que, de no realizarse esta ampliación, "peligraría la prestación de ciertos servicios esenciales cuyo responsable es el Estado nacional".
Refuerzo en salud y seguridad
En el ámbito de la salud, el DNU inyecta fondos adicionales a hospitales nacionales de referencia como el Garrahan, Favaloro, El Cruce y el de la Cuenca Alta Néstor Kirchner, destinando recursos para insumos médicos, equipamiento y medicamentos. Además, la Agencia Nacional de Discapacidad recibirá partidas extras para cubrir pensiones no contributivas y subsidios a pacientes con hemofilia.
En materia de seguridad y defensa, se refuerzan los créditos para salarios, jubilaciones y equipamiento de la Policía Federal, las fuerzas armadas, la Policía Naval y la Caja de Pensiones de la Policía Federal, buscando potenciar la capacidad operativa policial.
Mejoras en jubilaciones y subsidios
El decreto también prevé un incremento presupuestario para ANSES, que se traducirá en mejoras para jubilaciones, asignaciones familiares y prestaciones por desempleo. Las universidades nacionales también se verán beneficiadas con fondos adicionales para cubrir los salarios de docentes y no docentes.
Adicionalmente, el DNU contempla una ampliación presupuestaria para el servicio de la deuda pública, con el objetivo de atender los pagos de intereses y amortizaciones. Se refuerzan asimismo los subsidios energéticos, incluyendo la Zona Fría y las tarifas de luz y gas, y se aumenta el financiamiento operativo de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación.
Esta es la segunda modificación presupuestaria del año y llega en un contexto de fuerte ajuste fiscal. Según fuentes oficiales, la medida busca garantizar el funcionamiento básico del Estado frente a la actual crisis económica, financiera y social. Las entidades responsables del gasto deberán ajustar sus excedentes de liquidez invirtiéndolos en deuda pública, respetando sus funciones específicas.