A menos de un mes de asumir su escaño como senadora de la coalición oficialista, la actual ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se prepara para ingresar al hemiciclo donde tendrá un encuentro institucional directo con la máxima autoridad de la Cámara Alta, la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel. Este momento cobra especial relevancia en el contexto de las tensiones y el distanciamiento público entre la Vicepresidenta y el círculo cercano al Presidente Javier Milei.
"Existe una relación, digamos, de distancia entre el Gobierno y la Vicepresidente. Es una distancia que abarca a todo el Gabinete. Ahora que asumo un rol institucional, mi objetivo es lograr que el Senado opere en respaldo de las ideas que representamos y que la llevaron a ella a ocupar ese cargo", declaró la senadora electa esta semana.
Bullrich enfatizó su estrategia de diálogo: "Nuestra solicitud hacia ella será simple: que nos preste su ayuda, y no que genere obstáculos", afirmó la funcionaria en declaraciones radiales.
La futura legisladora incluso reveló que ya se gestionó un primer contacto: "El viernes al mediodía tengo programada una reunión con ella. Fui contactada por el secretario parlamentario. Necesito ir al Senado a completar trámites, como la presentación de fotografías, y me informaron que la Vicepresidenta deseaba conversar conmigo; allí estaré", precisó.
La todavía ministra reforzó su postura institucional: "Cuando se logra construir una mayoría, la figura que preside el Senado debe garantizar la conducción. Yo prefiero que colabore, pues siempre es más ventajoso contar con su apoyo para simplificar el trabajo", sentenció Bullrich.
La agenda pendiente: Prioridades del oficialismo
Al ser consultada sobre los proyectos que esperan al oficialismo en la Cámara de Senadores, la ex presidenta del PRO hizo hincapié en una iniciativa pendiente: la ley de Ficha Limpia. "Creo que vamos a insistir con Ficha Limpia; quedó sin resolverse... Recuerdo que estábamos convencidos de que se votaba y no ocurrió; fue una gran desilusión. La gente me llamaba preguntando '¿Qué hicieron?', pero nosotros estábamos igual de sorprendidos... No sé qué pasó, fue una situación muy desagradable", lamentó.
Más allá de este proyecto, el Senado deberá abordar la reforma laboral impulsada por el Gobierno, un tema que ocupará un lugar central en las sesiones extraordinarias convocadas para el próximo 11 de diciembre.
Bullrich insistió en que el compromiso de campaña de impulsar la ley Ficha Limpia sigue vigente. "Es un tema que interesa muchísimo a la ciudadanía. Se sintieron defraudados cuando no fue aprobada. Recuerdo perfectamente el momento... eran cerca de las doce de la noche, estábamos viendo televisión en casa, todos seguros de la votación, y no se concretó. Fue un revés", reiteró. A pesar de aquel traspié parlamentario, Bullrich considera que el Gobierno retomará la iniciativa con la propuesta.
