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Tras la judicialización de la última sesión en la Cámara de Diputados, Martín Menem rompió el silencio para respaldar el proceso de elección de los nuevos auditores. El titular del cuerpo legislativo restó dramatismo a la presentación judicial de Cristian Ritondo, jefe del bloque PRO, y aseguró que las diferencias de criterio son "propias de la dinámica política".

El conflicto por la "letra chica" del reglamento
Menem respondió a las críticas de la oposición aliada que cuestionó las designaciones por haber ocurrido fuera del temario oficial de las sesiones extraordinarias. Según el riojano, el procedimiento se ajustó a derecho:

Mecanismo parlamentario: Destacó que se utilizó un "apartamiento del reglamento" avalado por tres cuartas partes de los presentes.

Cuestión de tiempos: Rechazó que el tratamiento de madrugada fuera una maniobra oculta, atribuyéndolo a la extensa duración del debate por el Presupuesto.

Legitimidad de las mayorías: "En este tema juegan los números", sentenció, subrayando que a La Libertad Avanza le correspondía un lugar por derecho propio.

A pesar de la tensión, Menem fue enfático al asegurar que el vínculo estratégico con el macrismo no corre peligro: "Es una apreciación de Ritondo y está en su derecho de ir a la Justicia, pero nada va a cambiar la relación con el bloque PRO".

El Presupuesto y la "victoria" oficialista
En el plano económico, el presidente de la Cámara baja ratificó la postura de Javier Milei sobre el Presupuesto sancionado. Aseguró que se trata de la hoja de ruta "más realista de los últimos 25 años" y recordó que el Ejecutivo mantiene la potestad de reasignar partidas para garantizar que el superávit fiscal sea innegociable.

Respecto al traspié parlamentario que resultó en la caída del Capítulo XI (vinculado a fondos para discapacidad y universidades), Menem prefirió enfocarse en el balance general de la jornada. "Se votó 20 veces y el oficialismo se impuso en 19. Fue un éxito total", concluyó, restándole importancia a un apartado que calificó como una pérdida menor por apenas seis votos frente al avance del resto de la ley.