Con la presencia de dos mamás de chicos con dislexia, que brindaron un emotivo testimonio de la experiencia que vivieron con el bullying, la crianza y el crecimiento en la comprensión de lo que ocurría. Las mamás son Gabriela Ochoa y Vanesa Churrarín.

Gabriela Ochoa dijo que "siempre hablar de la dislexia para mi genera emoción, soy una mamá que ha viviedo de cerca el trabajo arduo de tener un niño con dislexia y saber también que yo tambien soy una mamá con dislexia, no es una enfermedad, es una condición, una forma de vivir, es genético, es hereditaria, uno de cada diez alumnos tenemos dislexia, es como escribir con la mano izquierda..."

Luego detalló que "se presenta en la primer infancia, tanto en la motricidad como en la lectoescritura, empieza a marcarse con la lectoescritura"

"Con mucho esfuerzo hemos salido de la primaria, con mucho esfuerzo del secundario, con mucho Bullying, esto hay que destacar de las escuelas, y poner en el bullying, no solamente por una dificultad en el aprendizaje, sino tambien en el bullying general, hacer consciencia a los profesores de las adecuaciones necesarias para esta dificultad", agregó.