A dos semanas del trágico accidente en Plottier, donde fue atropellada por un patrullero, el estado de salud de Catalina, la niña de 9 años, sufrió un grave revés. La menor padeció un paro cardíaco que impidió la realización de una cirugía crucial que estaba programada para tratar las lesiones graves que presenta.
El hecho que la mantiene en terapia intensiva ocurrió el pasado 19 de noviembre en Plottier, cuando un móvil policial que circulaba a alta velocidad impactó a Catalina mientras andaba en bicicleta junto a una amiga, quien afortunadamente resultó ilesa.
El daño más complejo: el cráneo
Sus padres, Paola y Esteban, confirmaron que Catalina debía someterse a una compleja intervención quirúrgica que se focalizaba en la base del cráneo y la médula. Sin embargo, la cirugía no pudo llevarse a cabo debido a que la niña sufrió el paro cardíaco en el preoperatorio.
La familia indicó que, si bien han visto a Catalina mover sus piernas y abrir los ojos —un avance que la madre había comunicado con emoción días atrás—, el daño más preocupante se centra en su cabeza. Aún no se ha podido determinar el alcance de las secuelas neuronales causadas por el accidente, y el equipo médico sigue realizándole pruebas diarias para evaluar el daño cerebral.
Pedido de apoyo y cadenas de oración
Catalina continúa internada en terapia intensiva del Hospital Castro Rendón, donde, según la familia, se le está brindando toda la atención necesaria, por lo que no requieren traslado a otro centro de salud.
Desde el día del accidente, familiares, vecinos y amigos han mantenido una vigilia constante, organizando cadenas de oración en las afueras del Hospital. La familia reitera el pedido a la comunidad de continuar con el apoyo y las oraciones por la pronta y total recuperación de la pequeña, quien ya lleva dos semanas de lucha en la unidad de cuidados intensivos.
