La pintoresca Plaza de las Banderas, un punto de encuentro tradicional para los neuquinos durante este fin de semana largo, fue escenario de una visita tan inesperada como encantadora. Un joven zorro fue avistado paseando tranquilamente por el lugar, generando sorpresa y admiración entre los presentes.

Vecinos que disfrutaban de la jornada al aire libre, ya sea descansando, ejercitándose o compartiendo unos mates, fueron testigos de la curiosa aparición. Uno de ellos, cámara en mano, logró capturar varias fotografías del pequeño animal, que parecía explorar el entorno con una calma sorprendente.

La particular ubicación de la Plaza de las Banderas, donde el paisaje urbano se fusiona con los espacios abiertos que conectan con el campo natural de la Patagonia, facilita este tipo de encuentros entre la vida cotidiana de la ciudad y la fauna local. Esta cercanía permite, en ocasiones, que animales silvestres como este zorro se aventuren en zonas urbanizadas.

Si bien la presencia de estos animales puede resultar fascinante, las autoridades recuerdan a la población la importancia de mantener la distancia y evitar el contacto directo. Aunque puedan parecer habituados al movimiento de la ciudad, se trata de ejemplares en estado salvaje y es fundamental respetar su espacio y evitar cualquier acción que pueda alterarlos o poner en riesgo su bienestar.