Una madre y su pareja fueron arrestadas en el barrio Rocamora de la capital misionera, en una causa que investiga la explotación de una niña de tres años y la comercialización de videos sensibles a través de redes sociales.
Una escalofriante investigación por la difusión y presunta comercialización de Material de Abuso Sexual Infantil (MASI) culminó con la detención de dos mujeres en Posadas, Misiones. Las acusadas, de 23 y 42 años, madre e hija, fueron arrestadas en un allanamiento que tuvo lugar en el barrio Rocamora.
La causa, que se inició tras una denuncia presentada en el Juzgado de Violencia Familiar N°1 y que luego escaló al Juzgado de Instrucción 7 por su gravedad, se encuentra bajo la carátula de abuso sexual agravado.
El vínculo con las redes de distribución
La Unidad de Ciberdelitos de la Fiscalía, junto con la División Delitos Sexuales y el equipo de la SAIC, lideraron el operativo. Según trascendió, una de las líneas de investigación más perturbadoras sugiere que una de las detenidas, quien sería la madre de la víctima principal, de apenas tres años, no solo habría cometido el abuso, sino que además habría filmado los actos para luego vender el material a través de plataformas digitales como WhatsApp o Telegram, integrando redes de distribución de MASI.
Durante el allanamiento en la vivienda, ubicada cerca del cementerio La Piedad, los investigadores lograron asegurar pruebas cruciales. Se incautaron tres teléfonos celulares marca Samsung, junto con prendas de vestir y otros objetos que, tras el peritaje, confirmaron coincidir con los elementos que aparecen en el material de abuso que dio origen a la causa.
Rescate de las menores y pruebas clave
Al momento de la intervención policial, en el domicilio se encontraban tres niñas, incluida la víctima principal. Inmediatamente, se activaron los protocolos de rescate y contención. Las menores fueron trasladadas al Cuerpo Médico Forense para recibir asistencia médica y psicológica especializada, quedando posteriormente bajo la tutela y resguardo de familiares en un lugar reservado.
La autenticidad del material fílmico fue confirmada por técnicos de la Fiscalía de Ciberdelitos y de la SAIC. El video había sido entregado semanas atrás por un joven que había sido pareja de la mujer de 23 años, aunque no es el padre biológico de la niña. La pericia forense dentro de la vivienda fue determinante: se identificaron muebles y detalles del entorno que eran idénticos a los escenarios mostrados en las imágenes incriminatorias.
Las dos mujeres, tras someterse a los exámenes médicos de rigor, fueron alojadas en la División Resguardo de Detenidas de la Unidad Regional I, en la comisaría Decimonovena de Itaembé Guazú, a disposición del juez Miguel Mattos. En el operativo participaron diversas unidades especializadas, incluyendo la Comisaría de la Mujer y personal de Investigaciones Complejas.