La tensión en el oficialismo alcanzó un punto crítico este sábado, con un fuerte intercambio de acusaciones entre el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y la diputada Marcela Pagano. El conflicto se desató después de que Francos desestimara los señalamientos de Pagano, quien lo había vinculado a una supuesta filtración de audios. El ministro minimizó las acusaciones de la legisladora, calificándolas de "ridículas" y atribuyéndolas a su falta de experiencia y a la influencia de su pareja.
La respuesta de Pagano no se hizo esperar. A través de su cuenta en la red social X, la diputada arremetió contra Francos, refiriéndose a su pasado: "Tiene razón. No tengo su experiencia. No sé de operaciones políticas como la que usted hizo al ex presidente del BID, Claver Carone, junto a Gustavo Beliz", escribió.
En el mismo hilo, la diputada lanzó acusaciones aún más graves. Le recordó a Francos la "quiebra fraudulenta" de una empresa llamada Volare en Italia y lo acusó de haber "hecho pagar facturas por servicios que no fueron prestados" durante su gestión en el Banco Provincia, bajo el gobierno de Daniel Scioli.
Este enfrentamiento público se produce en medio de un escándalo por la filtración de un audio, supuestamente de la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei. Aunque el Gobierno calificó la filtración como una "operación política", el cruce entre Francos y Pagano deja al descubierto las profundas divisiones internas en el partido. Francos ha prometido que se investigará el origen de la grabación, incluso con la posible intervención de los servicios de inteligencia.