Según informó la aerolínea, el vuelo AA3023 experimentó un "problema mecánico" relacionado con el tren de aterrizaje, específicamente con uno de los neumáticos, minutos antes del despegue. La tripulación actuó de inmediato, activando los protocolos de emergencia y logrando evacuar a todos los ocupantes sin registrar víctimas fatales. Solo una persona fue trasladada a un hospital con una lesión leve, mientras que otras cinco recibieron asistencia en el lugar.

La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó que el incidente ocurrió en la pista 34L alrededor de las 14:45. Videos compartidos en redes sociales mostraron escenas dramáticas de pasajeros, algunos con niños y equipaje, saliendo por las alas del avión. "A mitad de la velocidad de despegue escuchamos un gran estruendo y un estallido", relató un pasajero a medios locales. "El piloto frenó inmediatamente y comenzó la evacuación".

El Departamento de Bomberos de Denver respondió con celeridad, logrando sofocar el fuego en la base de la aeronave. American Airlines ha retirado el avión de servicio para una inspección técnica exhaustiva, mientras que los pasajeros afectados fueron reubicados en otro vuelo hacia Miami ese mismo día. El impactante video del incidente fue compartido por el medio El Mundo.

Este suceso obligó a la suspensión de las operaciones en el aeropuerto durante aproximadamente una hora, generando demoras generalizadas en numerosos vuelos. Este no es el primer incidente reciente para American Airlines; a fines de junio, otra de sus aeronaves debió regresar de emergencia al aeropuerto de Las Vegas tras emitir chispas y humo poco después del despegue. En aquella ocasión, el avión también aterrizó sin heridos y fue retirado para revisión. La compañía aún no ha brindado mayores detalles sobre las causas técnicas del problema actual, pero aseguró que colabora con las autoridades para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de sus operaciones.