Lo que comenzó como una supuesta tragedia ligada a la ludopatía ha dado un vuelco inesperado. Romina Enríquez, la madre encargada de custodiar los fondos para la fiesta de egresados de un curso en Misiones, confesó inicialmente haber apostado y perdido los 17 millones de pesos de la recaudación. Sin embargo, nuevas revelaciones apuntan a que el dinero tuvo un destino muy distinto: el fracaso de un emprendimiento nocturno.
La coartada del juego
Según informaron en el programa Tarde o Temprano (El Trece), la versión del casino habría sido una pantalla diseñada minuciosamente. El periodista Pampa Mónaco reveló que Enríquez incluso figuraba en blogs especializados en azar, como "Casino Tops Online", presentándose como una "apasionada del juego". Esta presencia digital habría sido el artilugio utilizado para dar credibilidad a su confesión y ocultar el verdadero destino de los fondos.
El "negocio" que salió mal
La investigación periodística indica que el dinero de los alumnos no se esfumó en las mesas de apuesta, sino en la organización de un evento masivo.
·El proyecto: Un festival temático de "noche de los 90".
·Los gastos: Contratación de bandas invitadas, alquiler de barras y logística de producción.
·El resultado: El negocio fue un fracaso financiero absoluto. Al no poder recuperar la inversión, la mujer se encontró con un faltante millonario que pertenecía al fondo común de las familias.
Situación judicial
La mujer, que utilizó los ahorros destinados a los servicios y la fiesta de graduación de su propia hija y sus compañeros, se encuentra ahora bajo la lupa de la Justicia. Las familias de la escuela misionera, estafadas por la persona en quien habían depositado su confianza, exigen respuestas y la devolución del dinero, aunque el panorama es desalentador dado el destino final de los recursos.
Resumen de la estafa:
·Monto: 17 millones de pesos.
·Excusa original: Adicción al juego (ludopatía).
·Destino real: Financiamiento de un festival musical fallido.
·Estado: Investigada por la Justicia de Misiones.
