Imagen
El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a pronunciarse sobre la situación argentina tras el traspié electoral del oficialismo en la provincia de Buenos Aires. La vocera del organismo, Julie Kozack, ratificó el apoyo al rumbo económico impulsado por Javier Milei, aunque advirtió sobre la necesidad de mayor claridad en la política cambiaria y de avanzar con las reformas fiscales pendientes.

“Esperamos con interés el Presupuesto 2026 para continuar con los avances, sentar las bases de las reformas necesarias en materia fiscal y consolidar los logros alcanzados hasta ahora”, señaló Kozack en conferencia de prensa. El proyecto será enviado el lunes al Congreso y presentado por el Presidente en cadena nacional.
Contacto directo con Caputo y Georgieva

La portavoz confirmó que el ministro de Economía, Luis Caputo, mantuvo una conversación reciente con la directora del FMI, Kristalina Georgieva, para repasar la implementación del programa vigente. Además, adelantó que el funcionario podría viajar a Washington en octubre para la reunión anual del organismo.

Kozack también celebró los resultados fiscales obtenidos hasta agosto y destacó la continuidad del ancla fiscal, junto con la agenda de desregulación. Según el FMI, estos factores fueron determinantes para que la inflación mensual se mantuviera por debajo del 2% durante cuatro meses consecutivos.
Reclamo por la política cambiaria

Uno de los puntos más sensibles de la conferencia fue el mercado de divisas. En los días previos a las elecciones bonaerenses, el Tesoro utilizó dólares propios para intervenir en la cotización. Si bien el FMI fue notificado de esas operaciones, Kozack señaló que se trató de una medida “temporal” y reiteró que el organismo recomienda un marco monetario y cambiario transparente, consistente y predecible.

La vocera también insistió en la importancia de reconstruir las reservas internacionales, fortalecer la confianza en el peso y garantizar un acceso sostenido a los mercados internacionales de crédito.
Inflación y política monetaria

Al referirse a los últimos datos del INDEC, que confirmaron una inflación del 1,9% en agosto, Kozack consideró que la política monetaria restrictiva fue clave para frenar la inercia inflacionaria y contener la presión sobre el dólar. Sin embargo, advirtió que esas medidas deben flexibilizarse gradualmente para evitar un impacto prolongado sobre la actividad económica.

“El fortalecimiento del esquema de gestión monetaria y de liquidez será fundamental para mitigar la volatilidad de tasas de interés y los efectos negativos en la economía real”, concluyó la funcionaria.