El Fondo Monetario Internacional (FMI) llevó a cabo una reunión informal clave entre su equipo técnico y el directorio ejecutivo para discutir la primera revisión del programa acordado con Argentina. Este encuentro es un paso crucial que podría desbloquear un desembolso de 2.000 millones de dólares, pero se produce en un contexto de crecientes preocupaciones sobre la economía argentina.
La discusión tuvo lugar tras recientes novedades, incluyendo la salida de una figura importante del organismo y cuestionamientos sobre el cumplimiento de las metas de acumulación de reservas por parte de Argentina. Si bien el FMI no emitió comentarios oficiales tras la reunión, reportes de agencias de noticias indicaron que el objetivo era debatir los avances del programa de 20.000 millones de dólares. Se espera que esta reunión sea el preámbulo a la aprobación final del directorio, que habilitaría el giro de fondos.
Reservas "críticamente bajas" y llamado a la competitividad
En las últimas horas, el FMI hizo públicas algunas advertencias sobre la situación de las reservas internacionales de Argentina. Un informe sobre el sector externo, publicado este martes, señaló que la posición externa del país en 2024 fue "más débil" de lo que implicarían los fundamentos económicos a mediano plazo y las políticas deseables.
Aunque el documento reconoció una "mejora sustancial" en los fundamentos económicos desde la asunción de Javier Milei a fines de 2023, también destacó que las reservas internacionales netas se mantienen en un nivel "críticamente bajo". Además, el organismo observó que, si bien los diferenciales de deuda soberana han disminuido drásticamente, aún se mantienen elevados. El Fondo enfatizó que la evaluación externa está sujeta a una "incertidumbre excepcionalmente alta" y depende directamente de la implementación de reformas estructurales que impulsen la competitividad y la productividad del país.
Recomendaciones del FMI: Flexibilidad cambiaria y economía de mercado
Como parte de sus sugerencias, el organismo multilateral propuso la implementación sostenida del recientemente aprobado programa de Facilidades Extendidas (EFF). Esto, según el FMI, es clave para mantener una balanza comercial robusta, atraer inversión extranjera directa, recuperar el acceso a los mercados internacionales y asegurar la sostenibilidad externa de Argentina.
Adicionalmente, el Fondo recomendó avanzar hacia un "tipo de cambio más flexible", junto con una "flexibilización gradual de las restricciones cambiarias" restantes, las prácticas de múltiples divisas y las medidas de gestión financiera centralizada.
Finalmente, el FMI instó a adoptar un "enfoque cauteloso en las políticas prudenciales" y a llevar a cabo reformas que fomenten una economía más abierta y orientada al mercado. Estas acciones, según el organismo, son fundamentales para generar resiliencia y atraer capitales sostenibles a largo plazo, explotando el "vasto potencial externo de Argentina, incluyendo los sectores de energía y minería".