En la audiencia de este lunes por la explosión de NAO, se repasaron algunos de los argumentos que dejó la fiscal Sandra González Taboada cuando hizo la formulación de cargos a los entonces 7 imputados, de los cuales quedan 6. Una de ellos es que los trabajadores de NAO operaban sin instrumentos básicos de medición como termómetros, radares y manómetros, ejemplificó. “Es decir que no podían conocer de ninguna manera parámetros de operaciones seguras. Debiendo ascender los operadores a los tanques para verificar el llenado y el nivel de los mismos”, explicó y señaló que en muchos casos apelaban al "ojímetro".

Como se recordará, el 21 diciembre de 2021, 10 meses antes de la explosión -que ocurrió el 22 de septiembre de 2022- hubo un incendio en el mismo tanque que luego volaría que los trabajadores atendieron con matafuegos porque no tenían red contra incendio.

Durante su exposición, González Taboada adjudicó la explosión a dos motivos: "Uno, un sinnúmero de incumplimientos de mandas legales... y dos, las falencias en los funcionamientos de diferentes equipos y equipamientos como también la carencia de diferentes equipos e instalaciones".

"Es de destacar que tanto (Fabián) Obreque como Guido Torti, sabían que al momento de la recirculación se colocaba un trapo en la boca de medición y un ladrillo para amortiguar el golpeteo que realizaba la tapa al subir y bajar por acción de la presión generado por los vapores", describió.

González Taboada explicó que Obreque "el día 20 de septiembre de 2022, ordena al operario Diego Giménez enviar al tanque 205 fueloil. Le agregó 56 mil litros, o sea un 60% de la carga total del tanque. Esa tarde la controló a las 20. El producto que ingresa al 205 viene del 414 y de la caja de enfriamiento a una temperatura aproximada de 190 °. Al día siguiente el 21 de septiembre, el señor Obreque ordena al personal del turno tarde, bombear y completar el tanque 205 con solvente ultraliviano proveniente del 208".

Al describir las causas puntuales de la explosión; González Taboada sostuvo que "El 60% de ese tanque (205) se llenó con fueloil el 20, terminó a las 20. Y la tarde del 21 se le agregó el solvente utraliviano. A las 20, Obreque, sin respetar el tiempo de enfriamiento del fueloil, ordena al operador Juan Jesús Rubilar junto a su compañero Víctor Vielma carguen el 205, finalizando la tarea aproximadamente a las 21,30, con 37 mil litros. Dejando el tanque listo para recircular. Tarea que no hace ese turno por falta de tiempo. Esa tarea de recirculación seguramente la intentaron hacer Jara, Herrera y Molina", los trabajadores que murieron por la explosión.

"Es de destacar que tanto Obreque como Guido Torti, sabían que al momento de la recirculación se colocaba un trapo en la boca de medición y un ladrillo para amortiguar el golpeteo que realizaba la tapa al subir y bajar por acción de la presión generado por los vapores", describió.

La fiscal describió el momento culmine: “producto de esta conducta reprochable, a las 4 de la mañana hubo consecuencia directa por la orden impartida por el señor Obreque, se escucha el zumbido ensordecedor, se va tornando más fuerte, se tiñe todo de negro, se prende fuego y se produce la explosión”.

Finalmente resumió: “Tres directivas, impartidas el 20 y el 21 de setiembre de 2022, claramente violatorias de las normas y leyes aplicables a la industria petrolera, fue la causal que originó el escape, explosión e incendio en el cual perdieron la vida los trabajadores".