Los imputados son 6: Rodrigo Arias, gerente de la empresa por el delito de estrago culposo, agravada por la muerte de tres operarios, en calidad de autor.
Además: Guido Torti, Jefe de Planta; Silvio Saibene, Jefe de Mantenimiento; Natalia González Técnica en Seguridad e Higiene; Gimena Brillo Licenciada en Seguridad e Higiene y Alfredo Novaro, responsable de la firma que certificó y habilitó la empresa, el juez aceptó la figura de estrago doloso, agravado por la muerte de 3 personas.
Como se recordará, la fiscal Sandra González Taboada, al presentar la formulación de cargos describió que a las 4,10 de la madrugada del 22 de septiembre "Tras un fuerte zumbido, se generó una nube de vapores. Al tomar contacto con “una fuente de ignición idónea como fue uno de los artefactos eléctricos posicionados dentro de la sala de control – ubicada a una irregular distancia de 15 metros- del ya indicado tanque 205. Inflamándose, o sea, prendiéndose la mezcla y en su retroceso produce la explosión del tanque y la voladura del techo del mismo. Esta combustión súbita mencionada (deflagración), se produce con una onda expansiva y frente de llama de modo casi instantáneo, ocasionando la muerte de los operarios Herrera, Molina y Jara, que se encontraban trabajando y quienes se conducían a la sala de bombas donde se encontraba una artesanal y precaria red contra incendios, quedando atrapados en la bola de fuego producida al quemarse la masa de vapores emitidas, afectando además las instalaciones propias y linderas a la refinería, las cuales fueron envueltas por las llamas y los altos niveles de radiación térmica”.
Durante su exposición, González Taboada adjudicó la explosión a dos motivos: "Uno, un sinnúmero de incumplimientos de mandas legales... y dos, las falencias en los funcionamientos de diferentes equipos y equipamientos como también la carencia de diferentes equipos e instalaciones".
González Taboada, comenzó imputando a Rodrigo Arias, el Gerente General de NAO, que tenía oficina en Buenos Aires. "Se le reprocha haber permitido el funcionamiento de la refinería con una instalación eléctrica inadecuada. No apta para operar en el área clasificada con presencia de atmósfera explosiva", dijo.
En la misma línea le achacó "el haber permitido el funcionamiento de la planta con un diseño y ubicación de los equipos con fuego fuera del distanciamiento indicado por la norma legal hacia el área de proceso. Haber permitido el funcionamiento del parque de tanque de la planta de Plaza Huincul sin el sistema de liberación de sobre presión, ausencia de válvulas de presión y vacío, especialmente en los tanques de proceso, 205 y 206".
Sobre Arias también sostuvo que "es el encargado de la adquisición de los equipos para el buen funcionamiento operativo de la refinería. Debe disponer y controlar los parámetros de productividad. Ejerce de forma directa el control sobre el jefe de planta de Plaza Huincul, Guido Torti", detalló.
La fiscalía imputó a Silvio Saibene, Jefe Mantenimiento de la planta de la NAO en Plaza Huincul y le adjudicó que las instalaciones continuaran "operando los ambientes de trabajos claramente inseguros".
La fiscal Sandra González Taboada, imputó a Silvio Saibene Jefe Mantenimiento de la planta , que era el encargado de "garantizar la operatividad de los equipos y la seguridad de las distintas vías de conducción de los fluidos. Garantizar la seguridad.. dejando que continúen operando los ambientes de trabajos claramente inseguros".
Asimismo, le endilgaron que "No dio curso a los diferentes reclamos de los propios operadores de la planta. Se le achaca que sabiendo en forma directa, por observación propia, más los informes del personal de la planta que conocía el mal funcionamiento y las falencias que tenía la planta y a pesar de ello no tomó las medidas tendientes para garantizar la operatividad segura" de la planta.
Los fiscales volvieron sobre el tema de la red eléctrica remarcando que "la instalación era no adecuada y no apta" que presentaba "anomalías" y estaba "fuera de norma" aunque permitió que continúe la operatividad de la planta. "No garantizó la seguridad de las operaciones", dijeron.
González Taboada adjudicó la explosión a dos motivos: "Uno, un sinnúmero de incumplimientos de mandas legales... y dos, las falencias en los funcionamientos de diferentes equipos y equipamientos como también la carencia de diferentes equipos e instalaciones".
A Guido Torti, jefe de la Planta de NAO, se le achacó permitir "también el funcionamiento de la planta con un diseño y ubicación de los equipos con fuego fuera del distanciamiento indicado legal hacia el área de procesos y los tanques 205 y 206”, señaló.
La fiscalía también apuntó que los trabajadores de NAO operaban sin instrumentos básicos de medición como termómetros, radares y manómetros, ejemplificó. “Es decir que no podían conocer de ninguna manera parámetros de operaciones seguras. Debiendo ascender los operadores a los tanques para verificar el llenado y el nivel de los mismos”, explicó.