Después de tres días de intensa búsqueda, se confirmó que ninguno de los seis mineros atrapados en el reciente derrumbe en la mina El Teniente de Codelco, en Chile, logró sobrevivir.
Este trágico suceso sume a la nación trasandina en el luto, y si bien reavivó los recuerdos del milagroso rescate de 33 mineros en 2010, en esta ocasión, el desenlace fue distinto para los trabajadores.
El pasado jueves, un derrumbe ocurrió en el Proyecto Andesita de la mina El Teniente, la mina subterránea de cobre más grande del mundo. El incidente dejó a seis trabajadores de Codelco desaparecidos. Desde ese momento, se inició una operación de rescate.
Sin embargo, el domingo por la tarde, las esperanzas de encontrar sobrevivientes se desvanecieron. El fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, fue quien confirmó a la prensa el hallazgo del cuerpo de Moisés Esteban Pavez Armijo.
El fiscal informó que la búsqueda implicó un alto riesgo para los rescatistas, y explicó que un “derrumbe importante retrasó la maniobra de extracción del último cuerpo”.
El primer minero fallecido fue encontrado en la zona del Proyecto Andesita. El resto de los cuerpos estaban en el sector denominado El Teniente 7, en un radio de no más de 10 metros cuadrados.
A partir del lunes, la investigación sobre lo sucedido quedará a cargo de dos fiscales y un equipo multidisciplinario.
·Paulo Marín Tapia, de 48 años. Fue el primero de los trabajadores en ser encontrado y su fallecimiento se confirmó el mismo jueves del derrumbe. Se desempeñaba en labores eléctricas, incluyendo la instalación de escalerillas y el transporte de cables. Marín Tapia era funcionario de la empresa contratista Salfa Montajes. Nació en Illapel, región de Coquimbo. Estaba casado, tenía tres hijos y su esposa está esperando el cuarto.
·Gonzalo Ignacio Núñez Caroca, de 33 años. Su cuerpo fue encontrado el sábado por la tarde entre las rocas de El Teniente. Núñez Caroca nació en 1991 en la comuna de Graneros, donde egresó del instituto Santa Teresita de Los Andes en 2009. Luego, se estableció en San Francisco de Mostazal. Era empleado de la constructora Gardilcic.
·Jean Humberto Miranda Ibaceta, de 31 años. Su cuerpo fue hallado el domingo por la mañana. Miranda Ibaceta nació en agosto de 1993 en Rancagua y egresó del colegio Tomás Guaglen en 2011. Su padre explicó que Jean era el jefe dentro de su grupo de trabajo, dado su cargo de maestro mayor. En esa función, sus tareas implicaban ser el primero en llegar a su puesto de trabajo y preparar los materiales y herramientas para el desarrollo del turno. Tenía tres hijos y esperaba otro, ya que su esposa tiene casi cuatro meses de embarazo. Un hermano suyo, Michael Miranda, relató que Jean había atravesado una situación similar dos años antes, cuando una explosión de roca provocó un atrapamiento. Llevaba diez años en la minería y hacía tres meses se había titulado de técnico en minas. Era empleado de la constructora Gardilcic.
·Alex Araya Acevedo, de 29 años. Su cuerpo fue hallado el domingo. Araya Acevedo era el más joven del grupo y nació en Rancagua. En 2023, realizó un 2×1 en el colegio Monte Castello para egresar anticipadamente de la escuela secundaria y, de esta manera, incorporarse más rápido al mercado laboral. Era empleado de la constructora Gardilcic.
·Carlos Andrés Arancibia Valenzuela. Su cuerpo fue encontrado el domingo. Arancibia Valenzuela era el mayor del grupo y el único de los operarios atrapados que nació fuera de la región de O’Higgins; era de La Serena y vivía en el sector de Las Compañías. Había cursado sus estudios en el Colegio Salesianos. Era empleado de la constructora Gardilcic.
·Moisés Esteban Pavez Armijo, de 33 años. Fue el último minero encontrado por los rescatistas el domingo por la tarde. Nació el 30 de diciembre de 1991 y registraba domicilio en la comuna de Doñihue, en la provincia de Cachapoal, en la Región de O’Higgins. Sus allegados señalaron que estaba a la espera de su segundo hijo. Era empleado de la constructora Gardilcic.
Cabe mencionar que durante este primer domingo de agosto se realizó el funeral de Paulo Marín Tapia, con la presencia de cientos de personas que improvisaron un sitio de homenaje con velas, banderas y carteles en el ingreso a la mina y en los alrededores de Codelco.